Ventiladores pulmonares y terapia de oxígeno: ¿salvación contra el covid-19?
Puede parecer un mensaje apocalíptico, pero es tristemente cierto, las camas en unos días serán insuficientes para manejar las infecciones agudas de los pacientes más graves. Y los ventiladores pulmonares no están presentes en cantidades suficientes para garantizar una terapia intensiva y sub intensiva para todos los pacientes graves.
Por lo tanto, la única forma es jugar con anticipación: evitar el contagio y obtener un concentrador de oxígeno.
Ventiladores pulmonares: más demandados que Bitcoins
Este tipo de maquinaria, extremadamente costosa (precio aproximado entre 5.000 y 15.000 euros), es adquirida por las estructuras sanitarias y se deja en existencia sobre la base de las tendencias de las temporadas anteriores, en ningún caso hubiera sido posible predecir un pico tan alto de solicitudes.
Y a pesar de que ahora se confirma la necesidad de estos dispositivos para los pacientes más graves, los tiempos de aprovisionamiento significan que la demanda siempre será mayor que la disponibilidad real.
En pocas palabras, en unas pocas semanas, la mayoría de los pacientes se quedarán en casa, a pesar de las condiciones graves, debido a la falta de camas y ventiladores para la respiración.
Oxigenoterapia: el último baluarte
A este punto, todo lo que queda es confiar en el instrumento más simple y más fácilmente disponible en el mercado: el concentrador de oxígeno.
De hecho, el coronavirus actúa en los casos más graves al inflamar los alvéolos pulmonares y reducir la oxigenación en la sangre: los pacientes solo tienen que tomar oxígeno de una fuente externa para permitir que el cuerpo emprenda y gane la lucha contra el virus.
Sin suficiente oxígeno no es posible "armar" el sistema inmune para una lucha efectiva contra el virus.
Por lo tanto, el concentrador de oxígeno está demostrando ser un salvavidas fundamental tanto en la prevención como especialmente en la fase de terapia, como lo confirman también estudios recientes realizados en China.