Tomar control de los ataques de pánico
Los ataques de pánico se definen como episodios de intensa ansiedad acompañados de una sensación física de excitación extrema. aparte de que es posible reducirlos con una terapia respiratoria adecuada con algún tipo de concentrador de oxígeno, los síntomas de los ataques de pánico incluyen palpitaciones, debilidad, mareo, entumecimiento y hormigueo en las manos y los dedos, sudoración, dolores en el pecho, dificultad para respirar y la sensación de haber perdido el control. La actitud a los ataques de pánico en la EPOC se estima en alrededor de 10 veces mayor que en las personas normales.
Por qué las personas con EPOC sufren de ataques de pánico?
En la EPOC, los ataques de pánico a menudo se producen cuando el paciente sobrestima la amenaza inmediata presentada por el empeoramiento de la disnea. Sensaciones físicas, tales como falta de aliento y el ritmo cardíaco muy acelerado se interpretan de manera catastrófica, causando a menudo a los pacientes sensaciones de asfixia o de muerte inminente.
Controla el pánico antes de que el te controle
Si alguna vez has experimentado un ataque de pánico, usted sabe que puede ser aterrador. Prevenir estos ataques, o parar uno en curso, es la mejor manera de tomar el control sobre el pánico, antes de que sea el que nos controle. Aquí están 5 maneras de recuperar el control:
- Visita a tu médico - Existen varias terapias que son eficaces en el tratamiento del trastorno de pánico, incluyendo antidepresivos, ansiolíticos, inhibidores de la monoamino oxidasa (IMAO) y los antipsicóticos atípicos (tranquilizantes que reducen la tensión nerviosa).
- Practica técnicas de relajación - Una dosis diaria de la imaginación guiada, relajación muscular progresiva, respiración profunda o meditación ayuda a reducir la ansiedad intensa que se asocia comúnmente con ataques de pánico. Practicadas sobre una base diaria, las técnicas que promueven la relajación también pueden detener un ataque de pánico que ya está en marcha.
- Aumenta la actividad física - el ejercicio aeróbico regular, como caminar o andar en bicicleta, reduce el estrés y la tensión acumulada, aumenta la energía, mejorar el estado de ánimo y ayuda a dormir. Si su objetivo es gestionar con eficacia los ataques de pánico, entonces el ejercicio es muy recomendable.
- Busca asesoramiento profesional - La terapia cognitiva conductual (TCC) es un tipo de psicoterapia que ayuda el paciente a comprender los patrones de pensamiento y sentimientos negativos que influyen en su comportamiento. Los estudios sugieren que la TCC puede reducir significativamente los ataques de pánico en la EPOC que resulta en un menor número de ataques de ansiedad, pensamientos catastróficos o estancias en el hospital.
- Únete a grupos de apoyo - De acuerdo con la ''Anxiety and Depression Association of American", 40 millones de adultos sufren de un trastorno de ansiedad. Asistir a un grupo de apoyo, ya sea en línea, en un centro comunitario local, o en el hospital, proporcionará una red de apoyo social en el que refugiarse todo el tiempo que necesite.
